El Real Monasterio de Santa Clara aparece nombrado en el testamento de D. Jerónimo Briceño de Mendoza en 1590, aunque las obras no comenzaron hasta 1719. La tardanza en su construcción se debió a las dificultades económicas, que finalmente se superaron en 1756, cuando se instalaron las monjas. El solar original ocupaba el espacio comprendido entre la plaza de la Constitución, la calle Mariana y la calle Marín hasta su confluencia con Lectoral Sirvent. La apertura de la calle Jovellanos hizo que se construyera una nueva fachada para el edificio (la principal) y permitió que desaparecieran el huerto y la enfermería. Asimismo, la reconstrucción de la plaza de la Constitución, entre 1842 y 1846, obligó a derribar también la fachada principal de las monjas, que adaptaron su edificio para que encajara con otros de la plaza de la Constitución.
El Convento de las Puras ha visto muchos cambios desde su construcción en el siglo XVIII. La primera transformación se produjo en 1811, cuando se construyó la calle Jovellanos a través de la huerta. En 1837, el convento fue desamortizado y el Gobierno Civil y la Diputación Provincial se instalaron en él, obligando a las monjas a trasladarse al Convento de las Puras. La circunstancia más trágica a la que se enfrentó el convento fue durante la Guerra Civil Española, cuando fue incendiado, dejando únicamente su iglesia como elemento original, ya que el convento actual fue reconstruido después de la guerra.
La fachada principal de la iglesia da a la calle Jovellanos y muestra un arco de medio punto con rosca moldurada entre dos medias columnas sobre zócalo, que soportan un entablamento coronado por un frontón curvo partido para albergar la hornacina con la figura esculpida de Santa Clara. La fachada lateral, más sencilla, se encuentra en la calle Mariana.
Opiniones de los usuarios:
Edificio espectacular con una magnífica portada. La tradición oral afirma que si le regalas a las monjas clarisas una docena de huevos en los días previos a tu boda, el buen tiempo queda garantizado durante la celebración.